El Observatorio Vasco LGTBI+ ha recibido la denuncia de un nuevo incidente LGTBIfóbico ocurrido el pasado 20 de agosto hacia las 22 horas en Bilbao, en el que cuatro personas fueron agredidas verbalmente por una cuadrilla de chicos y chicas de entre 17 y 20 años. En concreto una de ellas, un hombre trans, fue insultado y amenazado físicamente. El incidente no fue a mayores porque el grupo agredido optó por irse del lugar tras la intervención de dos de las chicas del grupo agresor. Ellas frenaron físicamente a los agresores, aunque también les excusaron porque estaban borrachos.

Este incidente, no es el único ocurrido recientemente en Bizkaia, y más concretamente en Bilbao. El 6 de agosto, un artista drag bilbaíno, recibió agresiones verbales, (Eh, maricón, ¿qué tienes polla o coño?, ¿me quieres comer la polla bujarra?, sufrió intimidación física (le quitaron los cascos que llevaba puestos, y al intentar moverse de sitio lo agarraron para impedírselo), así como amenazas de muerte (hoy no vas a volver vivo a casa), por parte de un grupo de jóvenes cuando viajaba en el metro hacia su trabajo. Todo se desarrolló sin que el resto de personas que ocupaban el mismo vagón, prácticamente lleno, hicieran nada para ayudarle. Finalmente, una señora intervino para arroparlo y avergonzar al resto del pasaje por su actitud, afortunadamente los agresores se bajaron en la siguiente parada.

El 25 de julio, en el exterior de la discoteca Santana/Fever, en Bolueta, Ángela C, una joven mujer trans fue atropellada intencionadamente por un hombre con su coche. Ingresó en estado crítico en el hospital de Cruces, con ambas piernas destrozadas Su familia considera que la motivación del autor de este suceso tuvo que ver con su identidad sexual o de género, algo que está por determinarse en la investigación en curso. Mientras, en las redes sociales, asistimos a la publicación de numerosos comentarios racistas y xenófobos, relacionados con las características físicas y de presunta procedencia de quienes intervinieron para detener al autor, e incluso de la propia víctima, muy alejados del debido respeto que tanto ella como sus familiares merecen.

Respecto a estos tres sucesos no ha habido, que conste a este Observatorio, ningún pronunciamiento público por parte del Ayuntamiento de Bilbao.

Durante las pasadas fiestas en Gasteiz, hubo que lamentar otros dos incidentes homófobos. El primero durante la mañana del día 8 de agosto en el Casco Viejo, cuando un joven fue abordado por un grupo de hombres que le insultaron y empujaron. Otro al día siguiente de madrugada, en la zona de txosnas, con una agresión física violenta acompañada de insultos homófobos. Respecto a ambos acontecimientos el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz se pronunció públicamente el mismo día 9 de agosto. Reacción que felicitamos.

Finalmente, este Observatorio, ha recibido una denuncia anónima, en este caso que afecta al municipio de Idiazabal en Gipuzkoa, relacionado con insultos y agresiones verbales homófobos que, de manera reiterada, parece se están produciendo e involucran a vecinos de esta localidad.

Ante tales circunstancias, desde este Observatorio Vasco LGTBI+ solicitamos a todas las corporaciones municipales, y específicamente a sus máximos responsables, actuaciones firmes y respuestas inmediatas. A tal fin, consideramos que una buena herramienta operativa la tienen ya a su disposición en la Guía de actuación local ante incidentes de odio racista, xenófobo, antigitano y LGTBIfóbico, que ha sido promovida desde el Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales de Gobierno Vasco a finales del pasado mes de julio. En ella se encuentran herramientas y procedimientos que pueden desarrollar, según la gravedad de los incidentes que sucedan en sus localidades.

Los recintos festivos, los espacios públicos y especialmente los de ocio, en todos nuestros pueblos y ciudades no pueden convertirse en lugares inseguros y de exclusión por motivo de género, orientación afectivo-sexual, identidad o expresión sexual o de género o por las características sexuales de las personas.

Es nuestro deber colectivo evitarlo. Desde este Observatorio consideramos la actuación de las autoridades municipales decisiva para conseguirlo.